"Di un puñetazo al despertador,
por respirar un nuevo día,
sé que sólo me aguarda dolor,
ya forma parte de mi vida.
Rasgué todos mis pantalones,
luego tatué todo mi cuerpo,
salí de casa por la ventada,
y saludé uno a uno a los cuervos.
-Hola, muy buenas, cuidese mucho,
¿Cómo está su madre? ¿Y su abuela?
Que significa toda esta mierda,
si bien sé que ellos me detestan."
02/06/2010
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